Síndrome de Guillain–Barré

15 de agosto de 2023

Datos y cifras

  • El síndrome de Guillain-Barré es una afección rara en la que el sistema inmunitario de un paciente ataca los nervios periféricos.
  • Pueden afectar a personas de todas las edades, pero es más frecuente en adultos y en personas de género masculino.
  • La mayoría de los pacientes se recuperan totalmente, incluso en los casos más graves de síndrome de Guillain-Barré.
  • Los casos graves del síndrome de Guillain-Barré son raros, pero pueden provocar una parálisis casi total y problemas para respirar.
  • El síndrome de Guillain-Barré puede ser mortal. Las personas con síndrome de Guillain-Barré necesitan tratamiento y seguimiento cuanto antes; algunas pueden necesitar cuidados intensivos. El tratamiento incluye cuidados de apoyo e inmunoterapia.

Panorama general

En el síndrome de Guillain-Barré, el sistema inmunitario del organismo ataca parte del sistema nervioso periférico. El síndrome puede afectar a los nervios que controlan los movimientos musculares así como a los que transmiten sensaciones dolorosas, térmicas y táctiles. Esto puede producir debilidad muscular, pérdida de sensibilidad en las piernas y/o los brazos y problemas para deglutir o respirar.

Se trata de una afección rara y, si bien puede afectar a personas de todas las edades, es más frecuente en adultos y en personas de género masculino.

Síntomas

Los síntomas suelen durar pocas semanas, y la mayoría de los pacientes se recuperan sin complicaciones neurológicas graves a largo plazo.

Los primeros síntomas del síndrome de Guillain-Barré incluyen debilidad o una sensación de hormigueo. Suelen empezar en las piernas y pueden extenderse a los brazos y a la cara.

En algunos casos, estos síntomas pueden provocar parálisis en las piernas, los brazos o los músculos faciales. En aproximadamente un tercio de los pacientes, los músculos torácicos se ven afectados, lo que dificulta la respiración.

En los casos más graves del síndrome de Guillain-Barré, la capacidad para hablar y para deglutir pueden verse afectadas. Estos casos se consideran potencialmente mortales, y los pacientes deben recibir tratamiento en unidades de cuidados intensivos.

La mayoría de los pacientes se recuperan totalmente incluso en los casos más graves de síndrome de Guillain-Barré; no obstante, algunas personas siguen presentando debilidad.

Incluso en los entornos más favorables, un número reducido de pacientes con síndrome de Guillain-Barré muere a causa de las complicaciones, que pueden incluir la parálisis de los músculos que controlan la respiración, sepsis, trombosis pulmonar o parada cardíaca.

Causas

El síndrome de Guillain-Barré es una afección rara. No se sabe a ciencia cierta qué la provoca, pero en la mayoría de los casos se manifiesta después de una infección bacteriana o vírica. Esto lleva al sistema inmunitario a atacar al propio cuerpo. Uno de los factores de riesgo más habituales en el caso del síndrome de Guillain-Barré es la infección por la bacteria Campylobacter jejuni, causante de la gastroenteritis (con síntomas como náuseas, vómitos y diarrea). El síndrome de Guillain-Barré también puede contraerse después de una gripe u otras infecciones víricas, como el citomegalovirus, el virus de Epstein-Barr y el virus del Zika.

En algunos casos, la vacunación puede aumentar el riesgo de contraer el síndrome de Guillain-Barré, pero la posibilidad de que esto ocurra es extremadamente baja. De los estudios se desprende que es más probable que una persona contraiga el síndrome de Guillain-Barré tras una infección (por ejemplo, una gripe) que después de recibir la vacuna para prevenir esa infección (en este caso, la vacuna contra la gripe). En algunas ocasiones, una intervención quirúrgica puede desencadenar el síndrome de Guillain-Barré.

Diagnóstico

El diagnóstico se basa en los síntomas y los resultados del examen neurológico, en particular una atenuación o pérdida de los reflejos tendinosos profundos. Puede practicarse una punción lumbar o una electromiografía para recopilar información complementaria, pero no se debe retrasar el tratamiento para realizarla. Otras pruebas para determinar qué ha desencadenado el síndrome, como los análisis de sangre, no son necesarias para diagnosticarlo y no deben retrasar su tratamiento. Toda persona que se considere que puede haber contraído el síndrome de Guillain-Barré debe ser objeto de un estrecho seguimiento que vigilar la aparición de dificultades respiratorias.

Tratamiento y atención

Recomendaciones para el tratamiento y la atención de personas con el síndrome de Guillain-Barré:

  • El síndrome de Guillain-Barré puede ser mortal. Los pacientes con el síndrome deben ser hospitalizados para que se les pueda hacer un estrecho seguimiento.
  • Las medidas de apoyo incluyen la monitorización de la respiración, la actividad cardíaca y la tensión arterial. En los casos en los que la persona tiene dificultades para respirar, suele recurrirse a un respirador. Todos los pacientes con síndrome de Guillain-Barré deben ser sometidos a vigilancia para detectar complicaciones, como arritmias, infecciones, trombosis e hipertensión o hipotensión arteriales.
  • No existen tratamientos que permitan curar el síndrome de Guillain-Barré, pero sí que pueden ayudar a mejorar los síntomas de la enfermedad y acortar su duración.
  • Dada la naturaleza autoinmunitaria de la enfermedad, en la fase aguda suele tratarse con inmunoterapia, como plasmaféresis para eliminar los anticuerpos de la sangre o inmunoglobulinas intravenosas. Generalmente, los mayores beneficios se obtienen cuando la inmunoterapia se inicia entre 7 y 14 días después de la aparición de los síntomas.
  • En caso de persistencia de la debilidad muscular tras la fase aguda de la enfermedad, los pacientes pueden necesitar rehabilitación para fortalecer la musculatura y recuperar el movimiento.

Respuesta de la OMS

La OMS presta apoyo a los países en la gestión del síndrome de Guillain-Barré de las maneras siguientes:

  • aumentando la vigilancia de agentes causales como la campylobacter jejuni o el virus del Zika;
  • proporcionando directrices para la evaluación y la gestión del síndrome;
  • apoyando a los países para que apliquen las directrices y refuercen los sistemas de salud con el fin de mejorar la gestión de los casos, y
  • definiendo programas de investigación sobre el síndrome.

El Plan de Acción Mundial Intersectorial sobre la Epilepsia y Otros Trastornos Neurológicos 2022-2031, de la OMS, tiene por fin abordar los retos y las lagunas a la hora de prestar atención y servicios a las personas con trastornos neurológicos, como el síndrome de Guillain-Barré, y garantizar una respuesta global y coordinada en todos los sectores.